Con 27 años y en plena madurez futbolística, Josua Mejías sigue dando pasos firmes en su carrera internacional. Actualmente milita en el Athens Kallithea de Grecia, donde disputa su segunda temporada y ha logrado consolidarse como titular indiscutible en la zaga. A pesar del difícil momento que atraviesa su club, el criollo mantiene un buen nivel y levanta la mano para ser considerado por el seleccionador nacional, Fernando «Bocha» Batista.
El Athens Kallithea no vive su mejor presente: marcha quinto en el Grupo del Descenso, con 33 unidades, y pelea por no bajar a la tercera categoría del fútbol griego. En medio de esa realidad, Mejías ha disputado 23 partidos esta temporada, aportando una asistencia y mostrándose sólido en el juego aéreo y en los cierres defensivos.
De Valencia al mundo
Formado en las filas del Carabobo FC, Mejías es un ejemplo del talento que exporta el fútbol venezolano. Tras brillar en el torneo local, dio el salto a Europa y acumuló experiencia en el balompié español con clubes como Leganés, Cartagena, Málaga y el Atlético de Madrid B. También tuvo una etapa en el Beitar Jerusalem, del fútbol israelí, antes de recalar en Grecia.
Pese a no haber debutado oficialmente con la Vinotinto en torneos de mayores, Mejías ya sabe lo que es vestir la camiseta nacional. Fue pieza clave en la histórica selección sub-20 que alcanzó la final del Mundial de Corea del Sur en 2017, y suma tres presentaciones con la selección absoluta. Su última aparición fue el pasado 26 de marzo, en un amistoso frente a Perú.
En la mira del “Bocha”
Las Eliminatorias Sudamericanas regresan en junio, y Mejías espera meterse en la convocatoria del «Bocha» Batista. Venezuela enfrentará a Bolivia el 6 de junio en el estadio Monumental de Maturín, en un duelo directo por el cupo al repechaje. Luego, la Vinotinto visitará a Uruguay en el mítico Centenario de Montevideo, en otra prueba de fuego.
Mientras tanto, Mejías continúa enfocado en su trabajo en Grecia. Con perfil bajo, disciplina y consistencia, confía en que puede aportar a la selección nacional, sobre todo en una línea defensiva que empieza a renovarse con nombres como el de Yordan Osorio y el ascendente Jon Aramburu.
Aramburu y el futuro de la Vinotinto
Con su despliegue físico, solidez táctica y personalidad dentro del campo, Aramburu se perfila como uno de los líderes del nuevo ciclo vinotinto. El defensor del Real Sociedad B ha ganado terreno en las últimas convocatorias y es una de las esperanzas para llevar a Venezuela, por primera vez en la historia, a una Copa del Mundo.
Josua Mejías, por su parte, no baja los brazos. En tierras griegas sigue trabajando con la ilusión intacta, soñando con una nueva oportunidad de defender el escudo que representa a todo un país. El camino al Mundial es largo, pero el central valenciano quiere ser parte de esa historia.