Antes que nada, Anthony Graterol, lateral izquierdo de la selección venezolana, construyó su carrera con pasos firmes dentro del fútbol local. Su trayectoria incluye experiencias en clubes con estructuras, ritmos y presiones diferentes.
Sin embargo, su mejor etapa se consolidó en el equipo donde acumuló más partidos, más responsabilidades y una evolución táctica decisiva. Su debut profesional ocurrió en el Caracas FC, un entorno exigente para cualquier jugador joven.
Allí mostró intensidad, velocidad y disciplina defensiva. No obstante, su participación fue irregular, ya que alternó entre la titularidad y el banco. Esa oscilación afectó su ritmo competitivo, aunque le permitió entender el funcionamiento de un club grande.
Posteriormente, Anthony Graterol pasó al Metropolitanos FC. En ese período, ganó más minutos y comenzó a desarrollar mejor su juego ofensivo. Sus proyecciones por la banda se volvieron más constantes y su capacidad de asociación creció.
Aun así, sus estadísticas seguían modestas y su impacto general no superaba el de laterales más experimentados. Todo cambió cuando llegó al Deportivo La Guaira, el club que marcó el punto de inflexión en su carrera.
Allí acumuló una cantidad mayor de partidos, actuó en competiciones internacionales y enfrentó rivales de mayor nivel. Con continuidad, Anthony Graterol mejoró sus tiempos de cierre, su lectura defensiva y su capacidad para apoyar el ataque sin desordenar la línea.
Además, su rendimiento regular coincidió con sus primeras convocatorias seguras a la selección venezolana, lo que reforzó su visibilidad nacional. Hoy, Anthony Graterol integra la Selección de Venezuela con mayor confianza, producto directo de la evolución que experimentó en La Guaira.
Anthony Graterol: El lateral tuvo un momento sólido e influyente en el Deportivo La Guaira
El paso por la Deportivo La Guaira sigue siendo el capítulo más completo de su trayectoria. Ningún otro club le ofreció tanta continuidad, tantas funciones defensivas y tanta responsabilidad táctica. Aunque Caracas FC y Metropolitanos aportaron formación y minutos valiosos, fue en La Guaira donde Anthony Graterol alcanzó la combinación ideal de ritmo, protagonismo y rendimiento. Por eso, especialistas y entrenadores coinciden: su mejor fútbol nació allí.




