Antes que nada, el Atlético Bucaramanga quedó eliminado de la Copa Sudamericana. A pesar de haber derrotado 1-0 al Atlético Mineiro este jueves (24) en la Arena MRV, el equipo colombiano no logró avanzar.
El cuadro brasileño se impuso 3-1 en la tanda de penales. El mediocampista venezolano Leonardo Flores estuvo en el banco de suplentes, pero no ingresó al partido. El gol de Atlético Bucaramanga llegó en el primer tiempo.
Tras un tiro de esquina, el defensor Jefferson Mena apareció con un cabezazo certero para abrir el marcador. Como el Galo había ganado 1-0 en la ida, el global quedó igualado y la serie se definió desde los doce pasos.
En los penales, el arquero Everson fue decisivo. Con dos atajadas, se convirtió en el héroe de la clasificación del Atlético Mineiro. El Atlético Bucaramanga solo anotó uno de sus tres cobros y se despidió de forma dolorosa del certamen.
El técnico Leonel Álvarez planteó un equipo táctico y ordenado. El conjunto colombiano controló espacios, fue intenso en la marca y neutralizó a las principales figuras del Atlético Mineiro durante los 90 minutos.
Una campaña histórica que termina con sabor amargo
Con esta eliminación, Atlético Bucaramanga cierra la mejor participación internacional de su historia. Sumó tres triunfos, dos empates y apenas una derrota en el tiempo reglamentario —la del partido de ida. Ganar en Belo Horizonte frente a un favorito demostró la evolución del equipo a nivel continental.
Leonardo Flores, que disputó cinco partidos en esta Copa Sudamericana —cuatro como titular—, ha perdido protagonismo en las últimas semanas y su futuro en el club está en duda. Aun así, fue parte importante de una campaña que dejó huella en la historia del Bucaramanga.
Ahora, el foco del plantel se traslada al torneo colombiano. Con el técnico Leonel Álvarez al mando, el equipo colombiana buscará mantener el ritmo competitivo y consolidar su proyecto deportivo en la temporada 2025.