Antes que nada, el Atlético Bucaramanga perdió 1-0 ante Atlético Mineiro en el partido de ida de los octavos de final de la Copa Sudamericana, disputado este jueves (17) en el Estadio Américo Montanini de Colombia.
Hulk anotó el único gol en el minuto 52, de penalti, que selló la victoria. El centrocampista venezolano Leonardo Flores, quien comenzó en la banca, entró en acción en el segundo tiempo, pero no logró cambiar el rumbo del partido.
Leonardo Flores entró al campo alrededor del minuto 60, mientras Atlético Bucaramanga intentaba reorganizar el mediocampo y acelerar la salida del balón. A pesar de sus esfuerzos, su presencia no fue suficiente para empatar el marcador.
La presión ofensiva del equipo local se mantuvo intensa, y la defensa colombiana, sin el control ideal que suele brindar el número 28, se mantuvo vulnerable. Como resultado, el equipo no logró reaccionar en el campo contra el Atlético Mineiro.
Internamente, el cuerpo técnico esperaba que la entrada de Leonardo Flores aportara mayor solidez y capacidad de transición. Se le considera una pieza clave en el esquema táctico del equipo dirigido por Leonel Álvarez.
Leonardo Flores mejoró al equipo en la segunda mitad
Tras el empate en la primera parte, el Atlético Bucaramanga intentó reaccionar en el campo. Con una formación más ofensiva, con tres delanteros y Leonardo Flores como apoyo creativo, el equipo tuvo algunas ocasiones de oro.
Pero tropezaron con una definición y una toma de decisiones deficientes en momentos clave. A pesar de la desventaja, el equipo colombiana logró cuatro remates dentro del área rival, pero ninguno se convirtió en gol.
El Atlético Mineiro, al contraataque, tuvo más ocasiones de gol, con siete remates en total. La derrota de Atlético Bucaramanga genera alarma para el partido de vuelta, que se jugará en el Arena MRV de Belo Horizonte.
Se espera que Leonardo Flores sea titular y aporte el equilibrio necesario. Sin la presión de la ida, el colombiano debería intentar neutralizar el ataque de Minas Gerais y buscar un buen resultado fuera de casa.
El equipo ahora enfrenta un reto aún mayor: revertir el resultado negativo y asegurar su pase a la siguiente ronda en el estadio del rival. Para avanzar, necesita ganar por dos goles. Una victoria por un gol obligaría a la final a los penales.