Lucas Bruera, guardameta argentino de 27 años y pieza clave del Carabobo Fútbol Club, no se guardó nada tras la caída del conjunto granate 2-0 frente al Botafogo, el pasado 8 de abril, en compromiso correspondiente a la segunda jornada de la fase de grupos de la CONMEBOL Libertadores. Desde Brasil, el arquero manifestó su molestia por las condiciones del gramado del estadio Nilton Santos, señalando que el sintético afectó el rendimiento del equipo.
Con más de 50 presentaciones oficiales con el elenco valenciano, y en su segunda temporada en el fútbol venezolano, Bruera —formado en Estudiantes de La Plata— reconoció que fue una noche difícil bajo los tres palos. “Como arquero fue muy complicado. Cuando uno patea, te raspa, la pelota va demasiado rápido. No lo podía creer, porque me habían dicho que era semi-sintético, una mezcla, pero era completamente sintético”, comentó el portero.
Adaptación y mirada al futuro inmediato
Pese al reclamo, el cancerbero granate admitió que la falta de costumbre pudo haber influido en la percepción del terreno. “Fue muy difícil, pero no hay que quejarse. Sinceramente, la cancha no estaba bien, pero también es porque no estamos habituados a ese tipo de piso”, explicó Bruera tras el compromiso.
Carabobo FC aún no suma unidades en esta edición de la Libertadores. En la jornada inaugural cayó también 2-0, esta vez como local ante Estudiantes, precisamente el club donde se formó su arquero titular. Ahora, el cuadro dirigido por Diego Merino buscará recomponer el camino en su próximo choque frente a la Universidad de Chile, en el estadio Misael Delgado de Valencia.
“A pesar de todo, creo que hicimos un buen partido y tenemos todo para ir por los tres puntos en nuestra casa”, afirmó Bruera, dejando claro que el equipo confía en revertir la situación.
Grupo A al rojo vivo
Con dos derrotas en dos presentaciones, el Carabobo FC marcha en el fondo del Grupo A y está obligado a sumar de a tres en sus próximos encuentros si quiere mantenerse con vida en el certamen continental. Aunque el panorama luce cuesta arriba, en el seno del plantel reina el optimismo y el compromiso de dar pelea hasta el final.